Fútbol

No hay mal que dure cien años

 

 

Un nuevo año se cierra y, con él, se va un nuevo campeonato de la Liga Lobense de Fútbol. Los Naranjos se consagró tras quince años de sequía en Primera división. Los dirigidos por Diego Vistalli cerraron un global de 6-3 frente a Madreselva y pasarán una Navidad con el mejor regalo de todos: el trofeo.

El naranja fue contundente de principio a fin. Los únicos dos errores que tuvieron en los 180 minutos significaron la ventaja parcial para Madreselva en el partido de ida. Pero con buen juego y coraje, sacó chapa de campeón y empató un partido clave para la consagración.

La lluvia, presente como todo el año, obligó a postergar una semana más la revancha. El partido de vuelta iba a jugarse en cancha de Deportivo Coreano el domingo 18/12, pero por distintas razones se terminó jugando hoy, en vísperas de Navidad.

El partido lo dominó el conjunto local en su totalidad. Acudió al buen pie de Rotta, Fusco, Bordón y Bustos y siempre que llegó al arco contrario lo hizo tocando y generando ocasiones colectivas que eran claras de gol. Lo de Gastón Fortunato fue sencillamente meritorio: jugó de 4, de 8 y hasta de win. En reemplazo de Nelson Fernández, quién no pudo jugar por acumulación de amarillas, ocupó el lugar de lateral derecho y jugó un partidazo.

 El primer tiempo fue muy parejo, con situaciones para los dos equipos y mucho pelotazo por el lado de Los Naranjos. La salida de Miguel Crocci le afectó a Madreselva en cuánto al juego aéreo, pero le dio una cuota de velocidad con el ingreso de Marcos Atencio.

 Víctor Brito no pudo ser determinante. El 10 de Madreselva no tuvo un buen partido y fue reemplazado en el entretiempo por Sebastián Pazos. El cañuelense, recordemos, fue también sustituído en la primera parte del encuentro de ida por una contractura en el isquiotibial. 

 Pero Los Naranjos fue el que abrió el marcador en la Ruta 205. Luego de un error defensivo del rojinegro, Manuel Bordón quedó mano a mano con Darío Navarro, pero no le quedó ángulo para definir y optó por darle el pase atrás a Gastón Fortunato. El ex EFIL no falló y puso el 1-0 para todo el delirio de la tribuna y el banco de suplentes.

 En el complemento las cosas siguieron equilibradas, aunque Los Naranjos seguía siendo el dominador de la pelota. A los 15′, Marcos Atencio derribó en el área al “Cati” Bustos y le dio la chance de estirar la ventaja. Fue el mismo Bustos el encargado de poner la historia 2-0 y dejar a Madreselva al borde del K.O.

 Minutos más tarde, una desatención en el área de Maglione produjo la falta de la defensa naranja sobre Accotardo y le dio una esperanza. El ex San Miguel de Las Heras tomó la pelota y pateó fuerte al medio, para poner el 1-2 en el marcador.

 Cazaux se la jugó a todo o nada por el empate, algo que puede salir bien como puede salir mal. Pero ésta vez las cosas favorecieron a Los Naranjos, que aprovechó la emigración de todo Madreselva en busca del 2 a 2 y pudo convertir dos tantos más para sentenciar la victoria y el campeonato.

 Primero, a los 38′, Manuel Bordón que definió con la clase y la categoría que lo caracteriza. Luego, a los 44′, Gabriel Fusco la clavó al ángulo izquierdo de Navarro y ahí no hubo tiempo para más. Mariano Lieve, de buen arbitraje (aunque podría haber sacado alguna amarilla más), marcó el círculo central.

 Los Naranjos se consagró campeón de Primera luego de 15 años (la última vez en 2001). Es tiempo de festejar, aunque la dirigencia y el DT deberán rearmar el equipo para el próximo campeonato ya que muchos jugadores actuales se irán del club (Maglione y Ayastuy, entre otros).

 Por el lado de Madreselva, hay que decir que el equipo no demostró ser la arrolladora que fue durante la fase regular. Muy atrás quedaron los dos triunfos sobre Los Naranjos en los dos partidos del 2016, lo cierto es que en los playoffs los dirigidos por Cazaux ganaron sólo un partido (frente a Club Las Heras y por 1-0) de los cinco que disputaron. 

 Una idea clara de juego, sumada a la experiencia y el buen pie de sus jugadores, fue determinante para que el naranja llegue a lo más alto. Pero como lo dijo Ayastuy, Los Naranjos no se desesperó en la final de ida cuando iba en desventaja y supo aprovechar los momentos.